jueves, 27 de diciembre de 2007

Patricia

Patricia resumió brevemente el proceso de organización e implementación del programa: la capacitación de numerosos voluntarios, el desarrollo de más de 100 centros de alfabetización “que funcionaron con calor, frío, lluvia, algunos en infraestructuras muy precarias” y el resultado hasta el momento en Rosario de más de 400 alfabetizados desde sus comienzos a fines del 2003.

Resaltó que entre alfabetizadores y alfabetizados se construyó el concepto de encuentro: “Encuentro es igual a solidaridad, esperanza, compromiso, respeto y muchas virtudes que nos han querido robar, y que hoy salen a la luz para seguir construyendo esta patria para todos y todas. Y no son solo palabras, son hechos, de cada capacitación, relevamiento, centro de alfabetizacion, de cada encuentro de nuestra vida pública y privada”.

Continuó remarcando la importancia de la educación popular en el proceso de alfabetización, “escribimos palabras, las leemos, pero también el contexto: porqué, para qué, cómo”.

Finalmente, dejó sentado que la alfabetización no es un punto de llegada sino sólo el principio de un camino: "Necesitamos coordinación concreta con los ministerios por la terminalidad primaria; necesitamos eliminar los obstáculos del camino que nos lleva a la educación pública, a esa educación que tanto apostamos y de la cual muchos de nosotros provenimos. Necesitamos programas coordinados con las instituciones intermedias, hay que dejar de subestimar a los que menos tienen, y abrirle las puertas y el corazón a quienes son capaces de ir día a día transformando la realidad".